Mírate ahora, abrazándome por las mañanas, mirándome con ternura, acompañándome en todos y cada uno de los recorridos.
En aquella sala había muchas sillas, muchas personas sentadas y una que faltaba. Yo estaba aburrida, no me interesaba lo que veía ni lo que escuchaba. Entraste por la puerta y mi corazón dio un brinco, sin aviso previo; se me iluminó la vida y, de la nada, apareció un pensamiento dirigido a ti: "¿sabes que vas a ser el padre de mis hijos?". Menos mal que no escuchaste aquéllo porque fue tan impertinente que hasta me asustó a mí.
En la puerta hay dos niños esperándote todos los días. A ti te llaman papá y a mí mamá.
Después, como por magia, todo mejoró hasta el infinito, hasta lo máximo que puede mejorar la vida de una persona. Un día me dijiste: "Y nos iremos descubriendo arrugas nuevas en la cara, pero nos vamos a mirar en los mismos ojos cada día, todos los días..". Sé que no lo recuerdas, tú no eres de ese tipo de persona...pero yo sí, y no lo olvido.
¡Ohhhh, qué bonitoooooooo! ¿Sabrás que le vas a poner colorado no?
ResponderEliminar¡Me encanta ver este tipo de declaraciones en mayúsculas! (yo podría escribir de todo porque no creo que ni se pase a leerme, jajaja, bastante con lo hablado para continuar con lo leído)
Gracias por compartir, y felicidades por esa linda familia que tienes!
Qué bonito Kym!! que emoción!. Ha sido precioso. Y lo mejor de todo es que eres consciente de tu felicidad. Un abrazo, amiga
ResponderEliminarSimplemente PRECIOSO!
ResponderEliminarQue bonito! Kym! Felicidades y que seas así de feliz para siempre
ResponderEliminarGracias a todas! :)
ResponderEliminarAdoro leer lo que escribís pero no me gustan los blogs :( entro solo a este, solo por vos y tus palabras :)
ResponderEliminarCeleste
Celeste, ¿y por qué ese rechazo hacia los blogs? De todas formas, eso hace que valore aún más el hecho de que pases por aquí.
ResponderEliminarUn abrazo!